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En la actualidad, el mercado de los televisores ofrece una amplia variedad de opciones con pantallas de mayor diagonal a precios más accesibles que nunca. 

De hecho, tienta mucho querer optar por el dispositivo más grande que quepa en nuestro mueble del salón o que podamos colgar en la pared. 

No obstante ello, usted debe saber que antes de tomar cualquier decisión apresurada, debe considerar varios aspectos adicionales que pueden afectar nuestra experiencia de visualización y nuestro bienestar.

Consumo eléctrico y eficiencia energética en televisores de gran porte

Lo que muchos usuarios pasan por alto es el tema del consumo eléctrico. Es más, la mayoría se centra en la resolución, el brillo y otras características, pero jamás prestan atención a cuánta energía consume, más si pretenden usar el dispositivo durante largas horas al día. 

Los televisores de mayor diagonal tienden a consumir más energía que los modelos más pequeños. Por ejemplo:

• Los equipos LCD más antiguos pueden superar los 200-250 vatios de consumo medio en tamaños de unas 50-55 pulgadas. 

• Los dispositivos modernos de gama media pueden tener un consumo estándar/máximo de hasta 282/438 vatios en pantallas de 85 pulgadas.

Ahora bien, para reducir el consumo eléctrico, se puede optar por tecnologías más eficientes como OLED, donde por ejemplo, el modelo “Sony AG9” tiene un consumo de 132/394 vatios en 55 pulgadas, mientras que el “LG G16LA” con panel EVO ofrece un consumo de 107/165 vatios en la misma diagonal.

Impacto en la salud visual

Un aspecto que debe tener siempre presente el consumidor, es que al adquirir un televisor de gran diagonal, el impacto en nuestra salud visual será importante. De hecho, mirar una pantalla demasiado grande a una distancia inadecuada puede causar fatiga visual y otros problemas.

En este sentido, los expertos recomiendan un ángulo de visión óptimo de 30 grados, lo que significa que la distancia mínima de visualización debe ser tres veces la altura del televisor o 1,6 veces la diagonal de la pantalla. 

Por ejemplo, para una distancia de menos de 2 metros, se recomienda un televisor de hasta 50 pulgadas, mientras que para distancias de 2,9 metros o más, podríamos considerar pantallas de 75 pulgadas o más.

Ten presente que mirar una pantalla grande a una distancia inadecuada además de la fatiga  fatiga visual, puede causar molestias en el cuello y la espalda, así como problemas de enfoque y visión borrosa.

Ambiente de visualización

Además del consumo eléctrico y la salud visual, también debemos considerar el ambiente de visualización. 

Las pantallas grandes pueden ser ideales para habitaciones con mucha luz ambiental, pero pueden resultar deslumbrantes en entornos con poca iluminación.

Ahora bien, si se planea ver televisión durante muchas horas, es clave tener en cuenta la intensidad de la luz ambiental y su impacto en nuestra comodidad visual. De hecho, en entornos con poca luz, una pantalla grande y brillante puede causar fatiga ocular y molestias.

En resumen, antes de comprar un televisor de gran diagonal, es importante considerar varios aspectos adicionales más allá del tamaño de la pantalla. Optar por tecnologías más eficientes como OLED y ajustar la distancia de visualización pueden ayudar a minimizar el consumo eléctrico y reducir la fatiga visual. 

Además, es importante tener en cuenta el ambiente de visualización y ajustar la iluminación según nuestras necesidades.

Por lo pronto, si pretende a corto plazo comprar un televisor, la decisión no debería basarse únicamente en la diagonal de la pantalla, sino en una evaluación completa de sus necesidades y preferencias. Eso sí, no olvide tener presente los consejos brindados en este artículo. 

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(S.M.C)